Sentires, desde mis tripas.

Deprimido y desanimado

Contemplo los estragos de una depresión de 6 años, en los ojos tristes del impaciente y me genera ansiedad, se hacen nudo mis tripas… sé que sigo siendo humana.

Escuchar su fatigada voz, la respiración corta, muy corta, desalentada, alzar la cabeza con impotencia, buscando en el techo algo que le motive, examinar en mi cara, en mis ojos algo que le dé esa seguridad, la evidencia de que esto que explico es parte de mi trabajo, que le transmito esto que aprendí a hacer.

Cómo infundir la confianza, el aliento de que estará bien si confía en él, en nosotros, cómo hacerles sentir esa tranquilidad después de que han sido defraudados varias veces; convalidar que esta puede ser la última vez que se sientan así porque lo he visto, lo tengo registrado, que no le estamos sobando el padecimiento.

Guarda silencio y su cuerpo abatido gira hacia mí, marco distancia en este espacio impuesto entre paciente y coTerapeuta porque va en contra de las reglas estrechar físicamente, me mira angustiado, le observo contenido, benditos escritorios, me mira exhausto: “intentaré pensar porque también quiero ayudar y desde aquí no puedo y no es por mi ¿lo entiende verdad?”, asiento con la cabeza y digo de acuerdo, se despide desde la puerta de salida; «mañana le llamaré».

AleskaMujerDeHuidaGarante

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Nube de etiquetas

A %d blogueros les gusta esto: