Cada cuándo piensas en ti como persona, como entidad ¿te has pensado alguna vez? así como lo haces, cuando imaginas a alguien que te significa un algo o que quieres, o sólo lo haces cuando tú mismo te importunas, te equivocas, olvidas un algo y hasta te nombras; ¡ay! fulanito ya la volviste a regar.
La pregunta es, quién es la persona más importante para ti en este momento… claro, ¡alguien de la familia obvio! La mamá por ejemplo, creo que para todos es la persona fundamental en la vida, aunque también papá, a veces depende de quién está más tiempo y convive mejor con el hijo, aunque puede ser la esposa o esposo, los hijos y entonces la esposa pasa a segundo término.
Pero si vives ya de forma independiente, con una mascota, dirías que es lo más importante en tu vida y te hasta te desvives justificando el porqué.
En cuestiones físicas, materiales, ¿qué es lo más valioso para ti en este momento?
¿Tu auto, tu casa? ¿el celular, tu trabajo? Cualquier equipo electrónico, tu ropa de marca, tal vez aquel coso que alguien te regaló y por eso le tienes muchas estima… la caja aquella donde guardas todos tus recuerdos. ¡No! la respuesta correcta es mi cuerpo.
¿Por qué no pensamos en nosotros mismos?, porque estamos para los demás. Es por costumbre.
En casa nos enseñan a pensar en los otros para quedar bien, para que sepan que nos importan, sólo porque son de la familia y que forman parte de nuestro pensamiento diario, es más hasta en las peticiones nocturnas los incluimos en la lista.
Nos tatúan que no hay que ser egoístas y pensar solo en uno, ¿tú crees que pensar en uno mismo, nos etiqueta como tal? à ¡No! eso es tener autoestima, dignidad, orgullo propio.
Sin malinterpretar, la familia, amigos y lo que quieran incluir son importantes, sí, pero es más valioso, lo que uno opina y proyecta de uno mismo.
Hay clichés con los que se crecen, como el de que las madres se sacrifican por los hijos y hasta se quitan el bocado con tal de que ellos puedan nutrir la tripa -y lo digo en forma literal-, y entonces hay que estar más que agradecidos porque la mamá hizo cuanto pudo y el hijo está en deuda –eterna eh! – y por ello hay que hacerle el supermegareconocimiento y rendir tributo por este sacrificio! Así es como se maneja esto de los usos y costumbres que se van heredando de generación en generación.
¿Y qué pasa con lo demás? con los padres, los abuelos que también participan en la formación de los críos, y parte de estas cuestiones importantes es; ¿quién o qué nutre el sentir, los afectos, a ti quién te expresa, quién numera tus habilidades y cualidades, quién los re-afirma? ¿La maestra cuando haces bien la tarea? ¿La gente del medio en donde te desenvuelves porque has hecho bien las cosas, porque cumples con el rol que te (entre comillas) “asignaron” y tu has aceptado en la sociedad y en la familia?
Ojo, no estoy diciendo que no sean personas que merezcan el respeto, de ese con el que nos han adoctrinado, no, el respeto se gana no es automático, claro, esto lo aprendí de grande, de joven me tocó rendir tributo a los viejos solo porque sí, aunque estos no eran tan gente con los niños.
A alguien le han reconocido por ser quien es, dejando de lado los títulos que se obtuvieron en la universidad.
¿Tu te conoces? o ¿te reconoces?
Cuando estabas en la escuela como parte del ejercicio o tarea hicieron esto del autoreconocimiento, ¿lo recuerdas o justo ese día faltaste?
¿Sabes qué es, para qué sirve?
Ayuda a conocer las cualidades, talentos, fortalezas de uno mismo, que son la base del afecto, de la aquerencia por uno mismo, el autoconocimiento ayuda a la madurez, hasta el reconocer los defectos es de gran ayuda porque se trabaja en ellos para adquirir destrezas que ayuden a desarrollar el intelecto.
Alguna vez te ha pasado que respondes a una pregunta y ¿te sorprendes por la respuesta? ¿Dices de dónde lo saqué? ¿Por qué dije eso? Lo has investigado o lo has dejado pasar.
Sabes ¿quién eres realmente? ¿Lo sabes? ¿Para qué estás aquí? ¿Qué tanto te conoces? ¿Sabes bien qué situaciones hacen que pierdas el control? ¿Lo que en verdad de avergüenza, te atemoriza? ¿Te aceptas tal cual? –física y mentalmente hablando-
Si te conoces tienes la respuesta del porqué actúas o te conduces de cierta manera, y créeme que no es porque tu abuelo, tío, la persona con quien vives o trabajas, no sé la, la persona con quien te comparen, porque dicen que heredaste sus malos modos, gestos o se te pegó de tanto compartir o cohabitar, etc.
Quien se conocer, sabe controlar sus impulsos, aunque claro, como seres humanos que somos a veces estos impulsos son cortos y zas te dejas llevar por la emoción de ese momento –como el enojo o la frustración que algunos paraliza a otros empuja a hacer un algo como gritar o golpear, la madurez nos da esa pauta para respirar y razonar antes de reaccionar, impulsivamente, si es que te sientes atacado.
Esto del autoconocerse es un trabajo diario, cada día aprendes o refuerzas lo aprendido, los conocimientos se van acumulando y con ello la seguridad y el crecimiento personal se notan.
¿Qué haces tú por ti y para ti?
¿Cómo te consientes?
¿Cómo te haces saber que te quieres, que sientes un afecto por ti mismo, que te amas?
¿Cómo te conquistas?
¿Te abrazas?
¿Has reconocido algo positivo en ti, felicitado por llegar a una meta, o compartes esperando que los demás te hagan el reconocimiento?
¿Qué tanto has dejado y dado a los otros para quedar bien?
¿Has pensado cómo será tu futuro inmediato?
¿Estás planeando tu vejez?
¿Cómo te vives?
¿Cómo se está realizando el ser humano? …tú.
¿Es a través de otros, de los padres, a través de los hijos?
¿Eres de los que piensan que con que ellos estén bien tú lo estarás, y en verdad es así?
Con que ellos coman no importa que tus tripas estén disputándose el juguito gástrico, no importa que la gastritis se asevere porque al final ellos están bien y no es tan grave que tu cuerpo se desgaste porque al final todo será para los otros.
Las cuestiones materiales, los otros son más valiosos que tú, aunque seas tú el que sale a conseguir lo necesario para vestirse, comer, tener un techo, educarse, divertirse.
Tienes oportunidad de mirar a alguien viejo, no se abuelos, vecinos, no para compararte solo para preguntarles y saber si están felices por ellos mismos, después de haberse sacrificado tanto, les llena el sentir después de haber cumplido la misión de vida que ellos adquirieron? Quién o quienes están con ellos, quiénes los procuran y ahora que ya no son productivos económicamente hablando, quién los protege a ellos, quién se sacrifica por ellos.
La vida es para vivirse, realizarse como persona, ser humano, compartirse como hijo, hermano, padre, madre, abuelo, gente de bien.
¿Te quieres?
¿Te aceptas?
¿Te amas?
Quiero que sepas que:
Tú eres la persona más importante para ti, y después, tú eres la persona más interesante para ti y después eres la persona más significativa para ti, porque eres único, porque tú eres tú y tienes mi admiración de persona a persona.
Y ahora dime, en este momento, quién es la persona más importante para ti.
Sonríe porque sí.
AleskaHadaVerde
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