Son 17 años que han pasado y creo que rápido porque no se me hacen muchos desde el último almuerzo, confieso que tengo que hacer cuentas para calcular los años no son más de 12 dije hace un año… te pensé; ay wey ya mero cumples la mayoría de edad-‘mórida’.
Aun puedo olerte y sentir tus manos con resto de ‘chemo’ ese con el que se pegan los zapatos, ese trabajo tan digno ahora llamado noble. El olor a tinta fuerte me lleva a ti.
Cada que escucho un clac clac clac ó tap tap tap digo: unas tapitas o tacones ¿no Zapatero?
Sabes, Ni me obsequió unos zapatos, me duraron harto así como año y medio, eran los de batalla hasta que un día un hermoso hoyo hizo que salieran de circulación y recordé aquellos zapatos de moda que tenían la correa atravesada recuerdas que no querías comprarlos porque no eran de los que pedía la escuela… a lo que pusiste un parche porque mi dedote gordo, –que por cierto es tu pinche gen jaja– para que me duraran un poco más.
Parece mucho tiempo si se cuenta por meses, si tuviera un cartucho por cada martes que ha pasado, serían los necesarios para celebrar los días 15 de septiembre, año nuevo y así saludarte hasta donde estés.
Gracias Zapatero, gracias, tiempo, gracias vida.
AleskaHadaVerde
Comentarios en: "¿Cuándo es que deja de doler la ausencia?" (4)
Admiro la nobleza de tu padre. La ausencia nunca se olvida. Estoy contigo este día y todos los demás. Un fuerte abrazo con mucho, mucho cariño.
Me gustaMe gusta
Gracias por tu estar allí. besos
Me gustaMe gusta
Hermosos sentirés desde tus tripas!, más bien desde tu cardio que estoy seguro lo tienes ahí o allí dentro harto grande y robusto.
Admirable y muy reconocido el oficio de tu padre, Zapatero. Abrazo para toda tú y espero que ya pronto se hagan tangibles los sentirés…
Me gustaMe gusta
Gracias besos.
Me gustaMe gusta